Como se explicó anteriormente, en el ornatus, el “’discurso no ornamentado’ (no suficientemente embellecido) es un error por defecto”; por el contrario, el [1]“artificio superfluo, sin mesura, sobreabundante (…) es el error por exceso” [2].

Extracto del texto Original: Retórica y Comunicación Estratégica

Autor: Christian Schaefer




[1] Op. Cit. 13.
[2] Op. Cit. 133.